¿Por qué tenemos cosquillas?
Las cosquillas son reacciones nerviosas que se producen en diversas partes de nuestro cuerpo ante el toque de una persona u objeto exterior a él. Al principio, el estimulo provoca risa y puede incluso ser placentero, pero tras un periodo largo de tiempo produce molestia. De hecho, las cosquillas han sido instrumento de tortura en varias etapas de la historia. Los romanos, por ejemplo, usaban vigas de madera para inmovilizar a las personas por el tobillo. Después, bañaban los pies de las víctimas con sal y soltaban varias cabras para que lamieran sin parar, produciendo en los prisioneros una sensación de cosquilleo. En la Edad Media, las cosquillas también se utilizaban como medio de castigo, ya que era una técnica que no dejaba huella alguna. Según la psicóloga Christine Harris, de la Universidad de California, las axilas son las partes del cuerpo más sensibles a las cosquillas, seguidas por la cintura, las costillas, los pies y las rodillas. Se han estudiado los orígenes de este fenómeno y, aunque no se ha llegado a ninguna conclusión absoluta, se ha demostrado que las cosquillas no son exclusivas de los hombres – los mamíferos, mayoritariamente – también reaccionan de la misma manera a determinados estímulos, por lo que su origen es anterior a la existencia del ser humano.
CuentaKm. Revista mensual para viajeros de AutoRes Julio-Agosto07. Número 2
GLOSARIO
- Huella – marca; vestígio
- Lamer – lamber
- Placentero – prazeroso
- Rodillas – joelhos
- Tobillo – tornozelo
De acuerdo con el texto,